miércoles, 5 de julio de 2017

Lo que mis ojos han visto en el Rocío.

La primavera llega y se produce una eclosión de sensaciones, olores y colores que nos inundan. Y es cuestión de colores, la primavera con sus ferias y romerías son la oportunidad perfecta para sacar a la calle nuestros trajes de flamenca.
 
El Rocío es una de esas citas de la primavera andaluza que nos permite disfrutar de este maravilloso vestido durante ocho días seguidos.  Para acudir a esta romería bien ataviadas conocemos con anterioridad las propuestas que jóvenes y consagrados diseñados dieron a conocer en #WeLoveFlamenco y #Simof entre otras, y que nos servirán de guía de estilo para elegir nuestros looks rocieros.
Ahora bien, pese a que en las pasarelas hemos encontrado infinidad de propuestas, no todo vale para todo. Hay que saber distinguir entre ferias, romerías y otras fiestas similares. A continuación analizaremos los aspectos más destacados en cuanto a los estilismos que pudimos ver en la pasada romería del Rocío.
 
A) TRAJES DE FLAMENCA SIN VOLANTES.
 
Una elección muy extendida, no sólo para esta romería, también para las distintas ferias y fiestas de nuestra provincia ha sido el traje ajustado al cuerpo, cortado al talle con una falda compuesta por un único volante de capa. Este único volante de capa generalmente se ha aderezado por carruchas o tiras fruncidas de la mis tela o incluso nada.
Esta hechura que tanta aceptación parece tener, en mi opinión está más cerca del traje típico madrileño que de nuestro maravilloso traje de flamenca.

Diseño: Carmen Acevo. Foto: Belén Vargas.
 
Diseño: Ángeles Álvarez. Foto: Belén Vargas.
 
B) LA INNOVACIÓN ESTÁ EN LAS MANGAS.

La tradicional manga larga con volantes es un básico y un clásico que nunca pasa de moda y me parece una opción infalible en cualquier diseño.
Este año ha compartido protagonismo con otros diseños como la manga larga al puño (sin volantes) y mangas que nos recuerdan a aquellas de los años 80 y 90 con volumen o volantes de capa que se reelaboran y reinterpretan.
Las mangas si se eligen bien, pueden ayudarnos a realzar nuestro traje y nos pueden ayudar a distinguir un traje de feria de un traje para el Rocío.

Diseño: Mercedes Dobenal. Foto: Belén Vargas.

Diseño: Mercedes Dobenal. Foto: Belén Vargas.
 
C) AUSENCIA DE MANTONCILLOS.

Hay quienes no nos desprendemos de él y hay para quienes este maravilloso complemente supone todo un engorro.
Las que nos hemos decantado por el mantoncillo hemos seguido apostando por sus múltiples variantes, desde los lisos a los bordados, pasando por gran diversidad de estampados.
Las que han declinado esta opción han optado por las tan de moda hombreras de flores con flecos y otros tipos de aplicaciones. Esta opción es original y además es tendencia, pero no es siempre aplicable a nuestro look.
En feria pueden resultar estupendas, en el Rocío desacertadas, tal vez por el contexto en que vamos la lucirlas, la ocasión.
Los flecos en el escote siempre tienen sus fieles seguidoras que también se van uniendo a eso de colocar un volante alrededor del mismo que hace las veces de mantoncillo, y suele ser más cómodo que los flecos.
En el caso de una romería y dependiendo de cómo sea nuestro diseño no está mal del todo. Dichos volantes también están de moda y nos vuelven a recordar aquellos diseños de los años noventa en los que había sitio para todo.
 
Diseño: Inma Linares. Foto: Belén Vargas.

Diseño: Yolanda Rivas. Foto: Belén Vargas
 
D) USO Y ABUSO DEL RAMILLETE.
 
Ya lo decíamos en nuestro post anterior; "el ramillete llegó para quedarse". Y es que la combinación de distintas flores en conjunto se ha convertido en la opción más elegida por las flamencas.
Claro está, dentro del concepto ramillete hemos podido encontrar multitud de tipos y variantes, no siempre acertados que van desde la elegante unión de flores a auténticos jardines botánicos en la cabeza.
La flor única y centrada ha pasado a segundo plano frente a nuevas tendencias. Aunque si el ramillete acapara protagonismo, no ha sido menos el caso de las diademas de flores. Quizás este complemento de tendencia se ha usado tanto como tocado en bodas, bautizos y comuniones, que no parece que sean el adorno floral típico de flamenca.
Desde nuestro blog apostamos por el ramillete o flores individuales, pero si se quiere recurrir a la diadema, consideramos que son más apropiadas para lucirlas en feria.
También queremos señalar que los ramilletes nos encantan porque dan juego y vistosidad, pero no nos gusta el exceso.
 
Diseño: Luisa Pérez. Foto: Wappísima.
 
E) COMBINACIONES ERRÓNEAS.
 
En algún programa previo a la romería oímos decir a una peregrina cuando le preguntaban cuál era el atuendo correcto para la romería que era "una falda ligera, una camiseta básica, un mantoncillo y una flor". Disculpe que le corrija señorita, pero no.
Ella irá muy cómoda y se verá monísima, pero eso es hacer un apaño con lo que tienes en casa, un estropicio en estado puro.
El traje de flamenca o en este caso la bata rociera tienen sus características y nos dan múltiples posibilidades para ir cómodas y bien vestidas sin necesidad de hacer este tipo de combinaciones con faldas de estilo hippie y camisetas de zara. Aunque estas faldas tengan estilo de trajes canasteros y sean vistosas por sus colores y estampados, no se enmienda nuestro look con un mantoncillo y una flor. Os pueden sacar de un apuro, pero ni vais vestidas de flamencas, ni vais bien vestidas.

Diseño: Pitusa Gasul. Foto: Belén Vargas
 
Con estos apartados damos el repaso a las tendencias que han marcado la romería del Rocío y con esto volvemos a lo dicho al principio; no todo vale para todo. Ir bien ataviadas no es cuestión de economía, sino de buena elección. No todo lo que vemos en los desfiles podemos llevarlo en cualquier ocasión. Por éso lo mejor es tener claro dónde vamos y qué estilo queremos lucir. Tal vez la clave es ésa, el estilo.